HOY SE MENOS QUE AYER


Me he dado cuenta con los años que lo que creo desconocer hoy es mucho más grande de lo que creía desconocer ayer, es decir, a pesar de que evidentemente aprendo cosas nuevas, irónicamente mi noción y la realidad de lo que desconozco se incrementa exponencialmente.
 
“Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro” - René Descartes

El único problema de esta frase de Descartes es que habría que redefinirla en base a una fórmula matemática que considere que lo que ignoró tiene un crecimiento directamente proporcional al cambio constante al cual se encuentra sometido el Universo y todo lo que lo constituye.

De la misma manera en que estamos relativamente concientes del cambio que ocurre en nuestro mundo atómico, así mismo, permanentemente nos asaltan las dudas en cuanto a lo que damos por sentado en nuestro mundo socio-económico, sabemos que hay algo injusto en el sistema, incluso hasta lo señalamos con nombre y apellido. Por lo general es mucho más sencillo echarles la culpa a los políticos, ya que si investigamos más a fondo tendríamos que gastar mucho más energía neuronal, y al final podríamos llegar a conclusiones que pondrían a prueba hasta los propios cimientos de nuestra fe.

La teoría de que los políticos son culpables nunca me ha convencido, puesto que en el sistema capitalista el primer poder es el económico, el primero es solo un subalterno del segundo. Además,  los políticos no son una raza alienígena con un ADN diferente al del resto de la humanidad, son personas de carne y hueso extraídas de los diferentes nichos o clases sociales vigentes. Cuando una sociedad mira a sus políticos, simplemente se está mirando en un espejo.

Por último, este artículo no define una respuesta exacta a lo que está mal en nuestro sistema socio-económico y como corregirlo, la cuestión está muy por encima de mi capacidad de análisis, mi intención es incentivarlos a tratar de ver más allá de lo que creemos evidente. CUESTIONA TODO.

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